«Carnaval» significa «fin de la carne», es la fiesta en donde todo se vale, donde todo se transfigura, es la realidad dislocada: disfraces, juegos de apariencias, parodia, travestismo, máscaras que combinan en su expresión irrisión y espanto, terror e hilaridad. El carnaval es la fiesta donde lo sagrado se mezcla con lo profano. Lo escatológico, lo subversivo, la risa y la blasfemia agarran vuelo y crean un vértigo social. La fiesta del fin del mundo que nos prepara para el sacrificio cuaresmal.
Hasta el 8 de marzo, antes del Miércoles de Ceniza, te recomendamos ir a cualquier tipo de carnaval. Si ya fuiste al de Río, ve ahora al de Ouro Preto, en Brasil, famoso por sus «ventanas eróticas», o al de Barranquilla, Colombia, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Si no te alcanza, ve al de Veracruz, Campeche, Mazatlán, o al de Tepoztlán. De menos ve al del Harry’s. Tú desfógate.
El Harry’s organiza su propio carnaval: el Mardi Gras, el carnaval de Nuevo Orléans. Disfraces fastuosos, collares típicos, máscaras medievales: la joie de vivre.
Tanto en el Harry’s de Querétaro como en el de San Miguel habrá, del 6 al 8 de marzo, bandas de jazz, performances teatrales y una carta de alimentos típicos de la comida cajún-criolla. Todo para que disfrutes estas fechas desinhibidamente.
El 30 de noviembre de 2010 salió el primer número de Sada y el bombón. Para hoy (miércoles), llevamos ya cuatro ediciones, 20 mil ejemplares, 100 post...
El carioca que sale de Río de Janeiro siempre será señalado como traidor. Es una falta de respeto abandonar tanta belleza, una osadía creer que puede haber una cosa mejor...
Atento, o sin estarlo –con una consigna–, llevo un tiempo pensando en los ruidos urbanos. A veces como si estuviera sentado en la banqueta de la aveni...
¿A qué suena el centro de México? ¿Qué ruidos concretos escuchamos en nuestras ciudades? A continuación los diez ruidos urbanos más representativos del Bajío: 1. Las c...